¿CÓMO DEBE QUEDAR UNA PULSERA?

El ajuste de una pulsera depende tanto de ti como de su diseño. Las pulseras rígidas clásicas están pensadas para llevarlas sobre la mano, por lo que se fabrican con un diseño holgado a propósito. Las pulseras brazalete de cuero, en cambio, sirven tanto para dar soporte a la muñeca como para darle un aire rudo a tu look, por lo que normalmente se llevan ajustadas.

Pero una cosa es cómo se deben llevar y otra lo que tú decidas hacer; lo veremos más adelante. Por ahora, vamos a explorar el mundillo de las pulseras para hombres y encontrar la que mejor se adapte a ti.

1. Mide la circunferencia de tu muñeca.
2. Decide si quieres que la pulsera te quede ajustada, normal o suelta.
3. Elige el modelo (el diseño afecta el ajuste).
4. Mira la guía de tallas en la página del producto para ver la talla que necesitas para obtener el ajuste deseado según la medida de tu muñeca.
5. Cuando recibas la pulsera, pruébatela antes de quitar cualquier parte del embalaje para comprobar que se ajusta como deseas.

Si no es así, cámbiala por otra en una talla más grande o pequeña*.

Para obtener la medida sin cinta métrica:

1. Busca una cuerda o un trozo de papel.
2. Colócalo alrededor de tu muñeca
3. Marca el punto en el que se cruzan los extremos con un bolígrafo.
4. Desenrolla la cuerda y mide la distancia entre las marcas: el resultado es la circunferencia de su muñeca (talla de la UE)

La medida promedio de una muñeca de hombre es de unos 18 cm.

Ajuste ceñido: añade entre 0,6 cm y 1,2 cm a la medida de tu muñeca

Ajuste normal: añade entre 1,3 cm y 1,9 cm a la medida de tu muñeca

Ajuste holgado: añade entre 2,0 cm y 2,5 cm a la medida de tu muñeca

Las pulseras de cuentas se suelen llevar con algo de holgura para que puedan moverse un poco en la muñeca, pero no tanto como para que cuelguen. La mayoría están diseñadas con una banda elástica de talla única, aunque algunas incluyen cordones o broches ajustables para adaptarse a diferentes tamaños de muñeca. Este tipo de ajuste les da un aire casual y natural.

Las pulseras de cuentas son perfectas para crear conjuntos de superposiciones. Lee nuestra guía para crear una combinación de pulseras perfecta aquí.

Las pulseras rígidas normalmente se llevan lo suficientemente sueltas como para que se muevan un poco por la muñeca, pero sin salirse. Por lo general, tienen un tamaño fijo, por lo que encontrar el ajuste correcto es esencial para obtener comodidad. Hay pulseras rígidas de talla única, pero a veces es difícil colocarlas si su tamaño no coincide con el de tu mano.

¿Sabes en qué se diferencia una pulsera rígida de una pulsera brazalete? Si tienes dudas, míralo aquí.

Las pulseras de cadena se suelen llevar algo sueltas, lo que permite que los eslabones cuelguen alrededor de la muñeca de una manera natural. A menudo incluyen cierres ajustables o tienen varias tallas a elegir para que puedas seleccionar el tamaño adecuado.

Intenta lograr un ajuste algo suelto, pero sin demasiado movimiento; solo lo suficiente para que la cadena se sienta cómoda sin que se resbale.

Las pulseras tipo brazalete tienen un diseño ajustable, por lo que son un accesorio de talla única. Se llevan ligeramente ajustadas en la muñeca gracias a los extremos abiertos que permiten apretarlas más o menos par obtener comodidad.

Este modelo se mantiene firme en su sitio, por lo que es una opción elegante y minimalista que no se mueve mucho.

Las pulseras de cuero son audaces, resistentes y transmiten un mensaje contundente. Por lo general, se ajustan firmemente a la muñeca para crear un estilo elegante y estructurado. La mayoría están disponibles en varias tallas para elegir, pero muchas también cuentan con broches o hebillas ajustables para personalizar el tamaño.

Las pulseras brazalete combinan bien con vaqueros, botas y franela para obtener un estilo natural y masculino. Se pueden usar solas o con otras piezas de cuero para crear un look de aventurero o superposiciones. Como el cuero envejece muy bien, este tipo de pulseras mejoran con el tiempo, mientras le dan carácter a tu estilo.

Las pulseras de cuero se pueden llevar ajustadas o sueltas, según el diseño. Los modelos trenzados y envolventes suelen tener cierres ajustables, por lo que suelen ser de talla única. Las pulseras de cuero lisas pueden estar disponibles en varias tallas.

Si buscas un look natural, póntelas sueltas y, si quieres algo elegante, elige un modelo ceñido que se mantenga cerca de la muñeca.

Las pulseras de paracord generalmente se llevan ajustadas en un estilo cómodo y práctico. Los diseños suelen ser ajustables o de talla única y con frecuencia incluyen un nudo o hebilla para facilitar el ajuste.

Dado que están diseñadas para actividades al aire libre, es mejor llevarlas ajustadas para que se queden en su sitio mientras te mueves, al tiempo que brindan comodidad para usarlas durante todo el día.

Se recomienda usar cada tipo de pulsera de un modo determinado, sin embargo, no dejes que eso te defina.

El siguiente dibujo te muestra cómo se ve una pulsera de cadena de longitud media en muñecas de diferentes tamaños.

Lo primero que tendrás que hacer será medir tu muñeca en el lugar en el que quieras que vaya la pulsera.

Después, busca la pulsera que quieras y usa la guía de tallas de la página, que está justo encima del menú para seleccionar la talla, y elige la adecuada en función del ajuste que desees obtener para la circunferencia de tu muñeca.

Tan pronto como recibas la pulsera intenta probártela sin quitar el embalaje por si necesitas cambiar la talla por otra diferente.


Nunca te pongas una pulsera tan apretada como para que te corte la circulación en la mano. Si sientes una sensación de hormigueo en las yemas de los dedos o si se aclara el color bajo las uñas después de un uso prolongado podría estar provocándote problemas de circulación.