Brochas de afeitar: guía definitiva

¿Alguna vez te has preguntado para qué sirve una brocha de afeitar cuando tienes dos manos para ponerte la crema de afeitar en la cara? Pues bien, no eres el único. La brocha de afeitar correcta en combinación con algunos productos de afeitado excelentes (para crear una espuma rica) cambiará tu vida.

Bueno, igual tu vida no. Pero sin duda cambiará tu experiencia de afeitado para mejor y hará que tengas un aspecto todavía más pulcro.

Una brocha de afeitar o brocha barbero es una pequeña brocha de mano que se utilizar para aplicar el jabón de afeitar o la crema en la cara antes del afeitado. Su diseño se compone de un mango que suele ser de metal, madera, cuerno o sintético y cerdas de materiales naturales y sintéticos.

Las brochas de afeitar están disponibles en una variedad de formas, tamaños y materiales, y son una parte esencial del kit de cuidado personal de cualquier hombre.

Estás a punto de encontrarte con unos términos sobre las brochas de afeitar y accesorios de afeitado que es posible que no hayas escuchado antes. Entender su significado es esencial para saber qué es una brocha de afeitar y cómo seleccionar la mejor.

1. Cerdas
   Los pelos o fibras de los que se compone la brocha. Las cerdas pueden proceder de animales como jabalíes, caballos y tejones o pueden estar hechas de materiales sintéticos. Cada tipo de cerda tiene sus pros y sus contras.
2. Altura del pelo
   La altura se refiere a la longitud del pelo desde la corona de las cerdas hasta la parte superior del mango. La altura media de la mayoría de las brochas de afeitar es de 55 mm.
3. Altura total
   Esta medida incluye tanto la longitud del mango como la altura del pelo para determinar el tamaño de la brocha.
4. Base
   La base está en el lado opuesto a la punta de las cerdas. Generalmente es cuadrada, por lo que se puede colocar sobre una superficie plana y se mantiene de pie. Otras son redondeadas, lo que permite que se puedan poner en un soporte y dejar colgando bocabajo.
5. Nudo
   El nudo es el lugar donde se junta y pega el pelo dentro de la base del mango. Cuanto más grande sea el nudo, mayor será la firmeza que se sienta al pasar la brocha por la cara y la cantidad de agua que retenga.

• Espuma
  La espuma es el factor más importante a la hora de determinar la calidad de un afeitado. Es el producto resultante al batir la crema de afeitado o jabón con la brocha. Esta espuma se usa para cubrir la cara durante el afeitado y protegerla y lubricarla antes de pasar la maquinilla, mientras que hidrata la piel.
• Capacidad de frotación
  La capacidad de frotación de una brocha se determina por la fricción entre tu piel y las cerdas. Las brochas potentes suelen tener un mango rígido, un mocho apretado y exfolian tu piel más efectivamente que las brochas blandas con un mocho suave.
• Retención de agua
  La retención de agua es importante porque te permite crear una espuma más rica y cubriente. Si las cerdas no son capaces de retener el agua suficiente, nunca podrás generar o controlar la espuma, lo que hará que la aplicación del lubricante sea un proceso largo y delicado.
• Resistencia
  La resistencia se refiere a la rigidez del nudo de una brocha. La resistencia aumenta a medida que lo hace la densidad del pelo o las fibras. Cuanto mayor sea la resistencia, más capacidad de frotación tendrá la brocha y ofrecerá una exfoliación mejor.
• Tazón de afeitar clásico
  El tazón clásico es en esencia un bol especialmente diseñado para contener la crema de afeitar o jabón. Hoy en día los tazones se usan para formar la espuma.
• Calentador de crema de afeitar
  No hay un premio por adivinar qué es esto. Un calentador de crema de afeitar es un aparato que sirve para calentar tu crema o jabón. Al contrario que el afeitado con agua fría, el jabón o la crema calientes son perfectos para abrir poros y lograr un afeitado más sencillo y apurado.

Las brochas de afeitar de la mejor calidad proporcionan una afeitado rápido y suave. Penetran en todos y cada uno de los pelos a la vez que los suavizan. Las brochas bien acabadas también consiguen eliminar las células muertas y exfoliar la piel, algo que los dedos no pueden hacer por sí solos.

Una brocha de buena calidad debe crear una espuma rica al introducir aire en tu crema o jabón de afeitado. La espuma protege y lubrica la piel, dejándola preparada para un afeitado suave. Si se hace correctamente, la espuma permitirá que la cuchilla se deslice sin problemas a través del área a afeitar, reducirá la irritación y proporcionará un acabado terso.

Sin la brocha correcta, nunca conseguirás la espuma correcta y, sin esta, es como afeitarse con un zapato mojado.

Si te pones a buscar todos los tipos de brocha de afeitar que hay, puedes acabar con la cabeza como un bombo. Hemos reunido los tipos más comunes de brochas de afeitar y sus ventajas para ti. Una vez que comprendas las fortalezas y debilidades de cada brocha, estarás mejor preparado para comprar una que se adapte a tus preferencias.

Las brochas de pelo de jabalí son más fuertes y hacen un buen trabajo a la hora de levantar el pelo de la superficie de la piel. Esto facilita la tarea de introducir la espuma bajo cada pelo para obtener una experiencia de afeitado satisfactoria.

El pelo de jabalí es una buena alternativa si nunca has comprado o utilizado una brocha de afeitar antes.

Pros:

• Se suavizan con el tiempo.
• Son más baratas que las de pelo de tejón.
• Levantan el pelo de la piel con eficacia.

Contras:

• Pueden resultar demasiado rígidas durante los primeros afeitados.
• Retienen menos agua que las de tejón.
• Pierden cerdas más deprisa que las otras brochas debido a la naturaleza quebradiza del pelo de jabalí.

La brochas de afeitar de crin de caballo han vuelto a estar de moda desde hace poco. Y si bien no retienen tanta agua como algunas brochas de pelo sintético o de tejón, son más que adecuadas si buscas un afeitado de tipo medio.

Pros:

• Más suave que el pelo de jabalí.

Contras:

• Retiene menos agua que algunos tipos de pelo sintético y el de tejón.
• Su olor puede resultar un poco fuerte durante los primeros usos (el champú para mascota puede ayudar a eliminar cualquier olor desagradable).
• Requiere de más cuidados que el pelo de tejón, lo que significa que tendrás que limpiar y guardar tu brocha apropiadamente cuando no la uses para evitar la pérdida prematura de cerdas.

Se suele decir que las brochas de las gamas de media a baja son demasiado rígidas o sueltas. Lo bueno es que la calidad de las sintéticas va mejorando a medida que avanza la tecnología, por lo que dentro de poco podría haber brochas de pelo artificial capaces de competir hasta con las mejores brochas de pelo de tejón.

Pros:

• Ideales para veganos o personas con alergia al pelo de animales.
• Hay una amplia gama de brochas de pelo de fibra sintética, desde las más baratas, hasta las que se parecen a las de pelo de tejón.
• Se sabe que las brochas sintéticas duran bastante tiempo antes de romperse.

Contras:

• Pueden resultar ásperas después de muchos usos.
• Las brochas más baratas retienen muy poca agua, por lo que la espuma que producen es pobre.
• Todavía se considera que las brochas sintéticas de categoría superior son inferiores a las de pelo de tejón punta de plata.

Las brochas de afeitar de pelo de tejón son las mejores que se pueden comprar, sin lugar a dudas. Los barberos de todo el mundo consideran que el pelo de tejón, tan suave y duradero, es la crema de la crema en cuanto a rendimiento e imagen.

Las brochas de pelo de tejón pueden durar muchos años si las cuidas apropiadamente.

Pros:

• Hay varios tipos de pelo: el de tejón negro o puro, gris, súper y punta de plata, siendo este último el mejor.
• Absorbe el agua mejor que cualquier otro tipo de pelo de animal o sintético.
• Es menos áspero sobre la piel.
• El pelo de tejón es increíblemente fino, por lo que cada brocha tiene una densidad de cerdas muy grande que consigue producir una espuma más rica.

Contras:

• Encontrar una brocha de pelo de tejón auténtico puede ser difícil, pues el mercado está inundado de imitaciones baratas.
• Las brochas de pelo de tejón suelen ser bastante caras, por lo que es probable que no sean la mejor opción para principiantes.

Las brochas de pelo de tejón negro o puro son las más fáciles de conseguir y baratas de esta categoría. El pelo para fabricar estas brochas se encuentra en aproximadamente el 60% del cuerpo del tejón, en áreas como el cuello, hombros, nalgas o abdomen.

Una de las ventajas de usar brochas de pelo de tejón puro es su habilidad para limpiar y exfoliar tu piel, gracias en parte a la rigidez del pelo que se usa.

• Los colores van del marrón oscuro al negro azabache.
• El pelo se extrae del cuello, hombros, abdomen y nalgas.
• Se suele considerar una brocha para principiantes.

Las brochas de pelo de tejón gris están a un nivel por encima de las de tejón negro. El pelo para este tipo de brocha se extrae del vientre del tejón, una zona donde es más largo, flexible y fino. Por esta razón, las brochas de pelo de tejón gris retienen el agua con más efectividad que las de tejón negro y producen una espuma más rica.

• Los colores van del marrón claro al gris.
• El pelo se extrae del vientre y otras superficies extensas del tejón.
• Se considera una opción muy razonable para los que buscan una brocha con una buena relación calidad precio.

El pelo súper tejón se obtiene de las regiones dorsales (la espalda) del tejón y es mucho más difícil de conseguir que el gris o el negro. Es más suave que el gris, pero no tan mullido (o caro) como el punta plata. El pelo súper tejón a menudo se confunde o mezcla con el punta plata debido a que las diferencias entre ellos son muy sutiles.

Uno de los inconvenientes de las brochas súper tejón es el gran mantenimiento que se requiere para mantener sus delicadas cerdas en perfectas condiciones de funcionamiento. Esto significa que tendrás que cuidarlas para aprovechar tu inversión.

• El pelo se extrae de los lados superiores del tejón.
• El espectro de colores de la parte central va del blanco moteado al gris claro y las puntas son de color blanco.
• Estas brochas son caras, poco comunes y prácticamente idénticas en cuanto rendimiento en comparación con lo las brochas de pelo de tejón punto plata.

Este tipo de pelo que se encuentra en el área del cuello de los tejones se usa para fabricar las brochas de afeitar más lujosas del mundo: las de tejón punta plata. Su reputación de ser las mejores se debe al hecho de que proporcionan el tipo de afeitado más mullido y retienen más agua que las brochas finas. Su coste es relativo, ya que duran muchos años si se cuida de ellas.

Afeitarse con una brocha de punta plata es una experiencia en sí misma. Es como dar un masaje en la cara que además permite aplicar la espuma de un modo suave, pero penetrante y extenderla con delicadeza por toda la cara. Se dice que una vez que pruebas el pelo de tejón punta plata, ya no hay vuelta atrás.

• Se consideran las brochas de más calidad de todas.
• El pelo para las brochas de tejón punta plata se extrae del cuello o el área cervical del animal.
• Los colores de esta brocha van desde el blanco crema de la base, hasta la banda en negro azabache y las puntas plateadas que le dan el nombre.

Los mangos de las brochas de afeitar deben acoplarse perfectamente a tu mano y ofrecer un agarre adecuado durante el proceso de formación y aplicación de la espuma. Pero, seamos honestos, ¿a quién no le gustaría tener un mango de madera pulida o de hueso de bisonte? ¿Y qué tal un mango hecho con cromo, latón, níquel, aluminio o materiales sintéticos?

A la hora de buscar la brocha perfecta, tienes que tener en cuenta el peso y la forma. Si es demasiado pesada, te resultará tan difícil de manejar como el pomo de una puerta. Pero, si pesa poco, te parecerá débil. En última instancia necesitas algo que te ofrezca el máximo control para poder acceder y rodear el pelo difícil de alcanzar de tu rostro y cuello.

La mejor manera de averiguar si una brocha es la adecuada para ti consiste en probarla. Decidas lo que decidas, ten en cuenta que una brocha es buena en la medida en que sus cerdas lo sean.

¿Cómo puedes saber lo que debe hacerte sentir una buena brocha de afeitar sin nunca has usado una? Antes de probar una brocha de afeitar por primera vez, es importante que tengas en consideración los siguientes factores:

¿Tiene una resistencia adecuada? La resistencia, también conocida como flexión, hace referencia a la rigidez que se atribuye al nudo de la brocha de afeitar. La resistencia de una brocha de afeitar es proporcional a su rigidez y rendimiento a la hora de bombear y batir para crear espuma. La capacidad de frotación de las brochas con el nudo más rígido es mayor, mientras que las que tienen un nudo más suelto son más flexibles.

¿Pierde cerdas con cada uso? Si encuentras algunos pelos en la piel o el lavabo en el transcurso de un mes y usas una brocha de jabalí del rango inferior o sintética, no hay nada de lo que preocuparse. La pérdida de densidad es algo que ocurrirá más adelante.

¿Ha sido fabricada de una forma ética? Otro punto para reflexionar es si la brocha en cuestión ha sido producida con ética o no. Si bien esto no era importante para nuestros abuelos o padres, hoy en día no hay excusa para no fabricar las brochas de afeitar o barbero de un modo sostenible.

¿Que sensación ofrece cuando la coges con la mano? ¿Tiene el peso característico de las brochas de buena calidad? ¿O el mango parece pobre y las cerdas te irritan o parecen flojas al contactar con la piel? A veces la única manera de saber si has seleccionado la brocha correcta es probarla.

¿La brocha te ayudó a conseguir un afeitado limpio, apurado y cómodo? Y por último, pero no menos importante: ¿cómo te sentiste al afeitarte? ¿Notas la diferencia entre aplicar la espuma con tus manos y con la brocha? La primer técnica puede hacer que el pelo se quede pegado a la cara, mientras que la segunda lo levanta para lograr un corte más eficiente y exfolia la piel. Debe retener el agua y cubrir toda el área que te gustaría afeitar con facilidad.

Es hora de dejar salir a tu Karate Kid interior, solo que esta vez no se trata de "dar cera, pulir cera", sino de "dar espuma, pulir espuma". Antes de poner a trabajar a tus herramientas de afeitado, te recomendamos que te des golpecitos en la cara con una toalla caliente para abrir los poros. También puedes empezar a afeitarte después de la ducha si lo deseas, ya que el vapor caliente relaja tu piel de un modo natural y hace que resulte más fácil.

Ve a buscar tu brocha y cuenco o tazón y echa un vistazo a nuestra guía paso a paso sobre cómo usar la brocha de afeitar para un afeitado húmedo a continuación.

En primer lugar, tienes que preparar un tazón poco profundo con el jabón y la crema, ya que es lo que tienes que usar junto con la brocha para crear la espuma.

1. Agarra tu brocha por el mango y humedécela con agua templada. Después agítala con cuidado para eliminar el exceso de agua. También puedes ponerla en remojo en el cuenco con agua templada. Procura que el agua no esté demasiado caliente.
2. Sumerge la brocha ligeramente en el cuenco de crema o jabón de afeitado y bate el producto hasta formar una espuma rica y cremosa.
3. Comprueba que la espuma tenga la consistencia que estás buscando. Una buena espuma es esencial para lograr un afeitado apurado.
4. Acerca la brocha a tu cara y muévela en círculos lentamente hasta cubrir todas las áreas de tu barba o rastrojo.
5. Después del afeitado aclara la brocha con agua templada para eliminar el jabón y la crema.
6. Aprieta y agita la brocha suavemente para eliminar el exceso de agua antes de guardarla con las cerdas apuntando hacia abajo en un soporte.

1. Después del afeitado, aclara la brocha con agua caliente (nunca hirviendo) para eliminar toda la espuma.
2. Coloca la brocha en un soporte de manera que las cerdas apunten hacia abajo. Esto aleja la humedad de la base y facilita el secado.
3. Guarda el soporte siempre en un lugar seco en lugar de un armario o bolsa para evitar el moho.
4. Aclara el cuenco o tazón y asegúrate de que queda bien limpio.
5. Nunca tires de las cerdas ni intentes secar la brocha o cuenco con un radiador o secador.
6. Deja la brocha de afeitar en el soporte para que se seque.

Da igual el cuidado que tengas a la hora de limpiar, secar y guardar tu brocha; aun así tienes bastantes probabilidades de que acabe un poco desgastada tras varios meses de uso diario. En lugar de tirar hacia delante con una brocha poco atractiva y con un rendimiento bajo o cambiarla por una nueva, puedes llevar a cabo una serie de tratamientos que te ayudarán a restablecer su antigua gloria.

Champú Tan solo añade una gota de champú suave (o champú para mascotas) al plato, cuenco o tazón en el que normalmente crees la espuma. Después moja la brocha con agua templada y úsala para batir el champú y crear una espuma.

Para continuar, masajea la cabeza de la brocha con champú y tu mano con cuidado para no dañar las cerdas. Aclárala con agua fría hasta eliminar toda la espuma. Luego aplícale champú a la brocha otra vez y repite el proceso sin olvidarte de aclarala bien una vez que hayas terminado.

Dale un repaso final con un peine suave para completar el proceso de limpieza y alisar los pelos erizados. También puedes agregar acondicionador al proceso si lo deseas.

Usar una brocha de afeitar es el medio más eficiente y efectivo de levantar el pelo de la piel y aplicar la crema o jabón de afeitar en todas las áreas que deseas afeitar.

No solo ofrece un afeitado suave, sino que también exfolia, hidrata y lubrica la piel. Además, si usas la brocha en lugar de tus manos, necesitarás menos crema o jabón.

La mejor manera de saber si una brocha es la correcta para ti consiste en analizar los resultados tras un mes de uso. Las cerdas se habrán suavizado para entonces, pero todavía mantendrán su forma cuando pongas la brocha de pie sobre una superficie lisa.

La brocha en sí misma debería resultar suave y cómoda al pasarla sobre la piel y dejar la superficie afeitada lisa y sin irritación.

La mayoría de las brochas baratas, como las de pelo de caballo, sintético o de jabalí de la gama baja pueden durar de entre varios meses a un par de años si las limpias, dejas secar y guardas correctamente. Las brochas de pelo de tejón o sintético de primera calidad pueden rendir bien durante de tres a diez años, o incluso más con el mismo tratamiento.

El cuidado que le dediques a tu brocha es lo que va a determinar su duración. Si creas y aplicas la espuma sin emplear mucha fuerza puedes prolongar su vida útil, así como si la limpias con un champú suave cada vez que sea necesario.

Si tu brocha está perdiendo celdas a una velocidad alarmante o necesitas mucha espuma y múltiples pasadas para deslizarte bajo cada pelo, intenta cambiarla por una que esté hecha con un pelo diferente.

Un poco de pérdida durante las dos primeras semanas de uso no es preocupante, pero si el pelo se cae por mechones, entonces tienes un problema. Recuerda que ocuparte de tu brocha es esencial para intentar que no pierda más cerdas de lo normal. No la retuerzas ni la laves con demasiada fuerza y deja que se seque siempre después de aclararla. Si hay pelos largos que se desprenden con un poco de pegamento unido a la parte de atrás, eso significa que tendrás que reemplazar la brocha en poco tiempo.

Eso depende exclusivamente de tus preferencias personales. Te sugerimos que experimentes con ambos para ver cómo reacciona tu piel y, lo que es más importante, mira a ver si producen una espuma rica al batirlos. Si tras múltiples intentos no eres capaz de crear una crema lo suficientemente densa, entonces deberías probar la otra alternativa.

Para conseguir que tu brocha te dure el mayor tiempo posible tienes que limpiarla, secarla y guardarla correctamente.

Procura usar agua templada (y no hirviendo) después del afeitado para limpiarla; después colócala en un soporte con las cerdas hacia abajo y deja que se seque por sí misma. Nunca la guardes en lugares húmedos como neceseres o alacenas.

El mejor tipo de brocha para un hombre moderno y elegante depende de una sola cosa: ¡lo elegante que seas! Si estás buscando una brocha de primera categoría, sin duda las mejores son las tejón punta plata. Si quieres una que ofrezca una buena relación calidad precio, entonces opta por una de pelo de caballo.

En teoría, estas brochas si diferencian entre sí por el área que cubren.

Las que tienen forma de bulbo suelen ser más pequeñas, pero ofrecen una mayor precisión a la hora de aplicar la espuma debido a la manera en la que las cerdas se achican gradualmente para formar una corona redondeada. Las de abanico están diseñadas para extenderse y cubrir una superficie grande.

¡Sí! Las brochas de afeitar de viaje son mucho más pequeñas que las normales y algunas incluso vienen con fundas ventiladas y agujeros en la parte de arriba y la de abajo para que se sequen más rápido. También hay brochas en las que la parte de las cerdas se puede extraer y guardar en el mango.

Para la mayoría de la gente, el tamaño es una cuestión de gusto personal. Si tu prioridad es cubrir un área del rostro grande, escoge una brocha grande. Las pequeñas funcionan igual de bien.

Sí. No obstante, si quieres disfrutar de un afeitado realmente profesional, será mejor que te olvides de ella.

Si estás buscando productos para un afeitado húmedo, recuerda que debes evitar el gel y la espuma en la medida de lo posible debido a la gran cantidad de ingredientes químicos dañinos y aceites minerales que habitan en las latas.

La crema es sin duda el mejor medio para conseguir una espuma consistente. Además, tiene propiedades hidratantes, por lo que al terminar tendrás una piel suave y sedosa. También puedes usar un jabón de afeitar, pero la gran cantidad de opciones que hay puede hacer que te pierdas. Desde los jabones de triple prensado hasta los duros o semiduros, pasando por los híbridos de crema y jabón. En cualquier caso, encontrar el jabón ideal para ti depende del precio y tus gustos personales.

Desbravar una brocha de afeitar es la única manera de deshacerse del muy distintivo y a veces desagradable olor que las brochas nuevas emiten con frecuencia. Es necesario para lograr que la brocha desarrolle todo su potencial. El primer paso para hacerlo es darle un lavado vigoroso con detergente para platos.

Después, déjala en remojo con el mismo detergente y agua templada de 10 a 15 minutos, procurando que el mango quede en posición vertical y seco. Por último, tendrás que crear una espuma con la brocha y después dejarla a un lado con espuma en las cerdas. Mantenla así toda la noche.

Al día siguiente lo único que tienes que hacer es aclararla con agua templada y dejar que se seque.

El objetivo es permitir que la humedad del agua y la espuma penetren para suavizar las cerdas y preparar la brocha para usarla en el futuro. Por favor, ten en cuenta que para que la brocha empiece a funcionar correctamente, puede ser necesario que pasen unas dos semanas, así que dale tiempo. Los pasos mencionados anteriormente sirven para acelerar el proceso.